La semana pasada, en un día nublado en Barcelona, salí de una de las grandes salas de conferencias del Mobile World Congress a la luz del día, apunté un teléfono al cielo y vi cómo se enviaba un mensaje por satélite, sin necesidad de red móvil.
Todo lo que necesitas es un dispositivo Bluetooth barato y una tarifa.
¿Pero es para tanto? Como siempre, el contexto importa.
Puede que tengas una buena tarifa de SIM con llamadas, mensajes y datos ilimitados, pero todo eso no sirve de nada si no tienes cobertura.
Muchas empresas tecnológicas están trabajando para encontrar la manera de incorporar las comunicaciones por satélite a los smartphones, porque hay veces en que, en sitios donde no hay cobertura, no podemos enviar ni recibir mensajes o llamadas.
Puede que te encuentres en una emergencia pero, no teniendo cobertura en tu móvil, querrías que tu teléfono pudiera utilizar la mensajería por satélite. Prácticamente ningún teléfono la lleva incorporada.
Apple ha añadido una función SOS de mensajería de emergencia a sus teléfonos iPhone 14, pero está limitada a unos pocos países y su precio no se ha anunciado todavía (es gratuita durante los dos primeros años).
Qualcomm, el proveedor estadounidense de chipsets para muchos fabricantes de Android, también está promocionando Snapdragon Satellite, su tecnología que sus clientes podrán añadir a sus smartphones de gama alta en el futuro.
Pero mientras que la función de Emergencia SOS vía satélite de Apple permite enviar mensajes a los servicios de emergencia, estos servicios no han sido diseñados para los mensajes de texto que mandamos por SMS, WhatsApp, iMessage, Telegram o cualquier otra aplicación de mensajería.
Podría pensarse que, si estas megacorporaciones aún no han conseguido llevar la mensajería por satélite al mercado de masas, probablemente tampoco lo haya hecho una pequeña empresa británica. Todo lo contrario.
Bullitt Group, con sede en Reading (Inglaterra), ofrece un servicio global de mensajería por satélite que permite enviar y recibir mensajes de y a cualquier persona que tenga un número de móvil en cualquier parte del mundo, y ya está disponible en Europa y Norteamérica para consumidores y empresas. Está diseñado para emergencias, pero técnicamente puede utilizarse para cualquier fin.
Bullitt lleva unos 15 años fabricando teléfonos como licenciatario, fabricando los aparatos pero vendiéndolos junto con marcas conocidas, como Motorola, para hacerlos más atractivos a los compradores.
Bajo aquel cielo nublado estaba conmigo Phil Wicks, responsable de marketing por satélite de Bullitt Group. Tenía con él el nuevo CAT S75, un teléfono Android de 599 dólares con conectividad por satélite integrada.
Utilizando una tarifa y la aplicación de mensajería de Bullitt, Phil consiguió mandar varios mensajes que personalmente vi cómo eran enviados y respondidos en directo, sin red celular de por medio.

Henry Burrell / Foundry
Según Wicks, hasta ahora las comunicaciones por satélite se realizaban a través de grandes y costosos aparatos no diseñados para los consumidores.
“No existe ningún motivo para que sea tan caro como lo ha sido hasta ahora”, aseguró Wicks. “Estamos demostrando que puede ser barato”.
El S75 puede enviar mensajes o ubicaciones en directo a contactos de emergencia, y también puedes utilizar un servicio de triaje mediante preguntas de respuesta múltiple con servicios de emergencia a nivel mundial en caso de que no seas capaz de redactar un mensaje.
Si no te apetece un teléfono CAT robusto y voluminoso, pronto podrás comprar el Motorola Defy Satellite Link (119 €), un dispositivo Bluetooth que añade comunicaciones por satélite a cualquier teléfono Android o iPhone.
Está equipado con el chipset MT6825 de MediaTek, uno de los competidores más cercanos de Qualcomm en el mercado. Hemos reconocido al Defy como una de las mejores novedades del MWC 2023 por su asequibilidad y la tranquilidad que puede aportar a tu vida (o a tu mochila).
“Estamos intentando asegurarnos de que podemos ponerlo en un factor de forma que sea mucho más fácil de usar, pero también de que las tarifas sean realistas… Se trata de poner el satélite al alcance de la gente”, siguió Wicks.
La app Bullitt permite enviar mensajes gracias al uso de dos constelaciones de satélites geoestacionarios de las empresas Inmarsat y EchoStar.
Los satélites geoestacionarios son los que orbitan alrededor de la Tierra a la misma velocidad que esta, manteniendo siempre la misma posición en el cielo. Se encuentran a 22.300 millas por encima de la Tierra y cerca del ecuador.
La persona que envía el mensaje necesita contratar la tarifa de Bullitt, pero el receptor no. Puedes comprar 30 mensajes en un plan mensual de 4,99 dólares.
Esto significa que podrías comprar el dongle Defy y una tarifa con 30 mensajes bidireccionales al mes durante un año por 169 €.
El servicio, llamado Bullitt Satellite Connect, ya está disponible en Europa y Norteamérica, pero Wicks afirma que a finales de 2023 lo estará en Latinoamérica, Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda, y después “en todos los demás sitios”.

Henry Burrell / Foundry
“No hay ninguna razón técnica por la que no podamos tener una cobertura global mundial, pero sí algunas razones geopolíticas. A Arabia Saudí, Irán, China y Rusia les molesta que la gente utilice los satélites sin que ellos lo sepan”, explicó.
Los planes siguen siendo relativamente baratos porque el servicio es de mensajería de texto simple. Obviamente, no es tan barato como enviar mensajes con una tarifa SIM normal, pero no hay que olvidar que se evita toda la red de telefonía móvil y se utiliza una tecnología muy nueva que no está al alcance de los consumidores.
Además, ¿qué precio le puedes poner a tu seguridad si te vas de aventura a un lugar donde probablemente no haya cobertura móvil?
“Utilizamos el canal IoT de banda estrecha, que utiliza pequeñas cantidades de datos. Así que se trata de intentar mantener ese coste bajo y utilizar la infraestructura que ya existe”, aseguró.
Los principales clientes de Bullitt son empresas como las de compañías de recuperación de vehículos, empresas de seguridad, compradores agrícolas, servicios de emergencia, primeros interventores y aquellos que se encuentran en zonas sin suministro eléctrico.
No obstante, la asequibilidad y disponibilidad del Motorola Defy hace que un dispositivo por satélite para emergencias pueda venderse en las tiendas de material de montaña especializadas, o incluso en el supermercado.
Los gigantes tecnológicos pueden hacernos creer que la mensajería por satélite es rara o cara, pero eso podría deberse a que no quieren mandarle el mensaje a los operadores de telefonía móvil de que en el futuro podríamos no necesitar redes móviles.
Esas relaciones de los fabricantes con los operadores son primordiales. Resulta que Bullitt no tiene esa preocupación.
Según Wicks, algunos operadores se asustan, pero los más grandes están invirtiendo ya en la tecnología. Su empresa va por delante de los acontecimientos.
“Somos una empresa relativamente pequeña, pero como somos un poco más dinámicos y flexibles, lo hemos resuelto bastante rápido. Las grandes empresas tardan tiempo en resolverlo”, concluyó.