Como muchos iFans, llevo usando productos de Apple más de lo que quiero recordar. Tanto tiempo que ya tenía un iPhone antes de que iOS se llamara iOS. Hay un motivo que lo justifica: me gusta todo del iPhone.
Me gusta cómo funciona con mi iPad y mi Mac, poder ver un vídeo en mi tele usando AirPlay, la inigualable oferta de apps y juegos en la App Store y el hecho de que iOS funcione tan bien.
No obstante, mi fe en Apple está flaqueando en los últimos tiempos y eso se debe exclusivamente a los smartphones plegables.
Los modelos de primera generación tipo Huawei Mate X y Samsung Galaxy Fold eran muy básicos y muy caros, pero me atrapó el concepto. Me encantaba mi viejo Razr V3, así que la idea de un móvil plegable moderno con una única pantalla me atrajo (y me sigue atrayendo).
Ese sueño se hizo realidad cuando Motorola anunció el Razr 5G y Samsung sacó el Galaxy Z Flip. Pero seguí aferrándome a mi iPhone puesto que las especificaciones de esos móviles no eran tan buenas como podrían haber sido, y seguían siendo caros.
Ahora mismo, en cambio, mi aferre por el iPhone 12 Pro está empezando a debilitarse. Y la razón es el Galaxy Z Flip 3. Es muy tentador. Cuesta poco más de 1.000 € en España y es posible encontrar alguna oferta, lo que hace que mis ansias por comprarlo sean mayores.
Apple, por otro lado, no parece que vaya a lanzar un iPhone plegable hasta 2023 o 2024. Y no creo que esté dispuesto a esperar tanto.
Por mala suerte, no tengo otra opción. Incluso si quisiera, no es posible pasarse a Android.
No estoy hablando de transferir de iOS a Android, algo que es bastante más fácil ahora con la actualizada función de Google Drive. No, es el ecosistema de Apple, que restringe sus productos para que solo funcionen con dispositivos Apple, el que hace que me quede con mi iPhone.
Si comprara un Flip 3, tendría que dejar de usar todos esos productos que me han costado tanto y, principalmente, que me gustan tanto.
Ejemplo de ello es el Apple Watch, seguramente el que ofrece una mejor experiencia de todos los smartwatches disponibles hoy. Es el motivo por el cual hay más de 100 millones de usuarios de Apple Watch, y la cifra sigue creciendo.
La sincronización de hardware y software hace que el Apple Watch funcione mejor y que pueda ofrecer más que su competencia Android.
Pero no existe ningún modo, ni siquiera con algún truco, para que el Apple Watch funcione con un smartphone Android. Así que pasarme a Android significaría que mi wearable de más de 400 € pasaría a ser inservible.
Imagínate comprar una televisión pero no poder verla hasta que te cambies a otro operador. Eso es lo que se siente si estás dentro del jardín vallado de Apple.
Lo peor es que hay otras compañías que han empezado a copiar el método de Apple y han puesto restricciones similares en productos de Android. El Galaxy Watch 4 de Samsung, por ejemplo, no es compatible con iPhone.
El Apple Watch no es el único motivo por el que no puedo hacer el cambio. También lo es el hecho de usar FaceTime para hacer videollamadas. Podría usar WhatsApp o Facebook Messenger, pero la mayoría de mis amigos y familiares usan solo FaceTime.
Aunque Steve Jobs dijo en su día que FaceTime llegaría a Android y otras plataformas en su lanzamiento junto al iPhone 4, eso nunca ocurrió. Podría decirse que empieza a ocurrir ahora que puedes unirte a llamadas (no realizar) con FaceTime Web desde Android.
Pero es una locura que el servicio de videollamadas se tan exclusivo y es una de las razones por las que otros servicios como Zoom tuvieron tanta presencia durante la pandemia.
Aparte de eso, dejaría de tener acceso a mi almacenamiento de iCloud y a mi historial de iMessage. No podría usar la mayoría de las funciones disponibles de mis AirPods Pro y no podría reproducir música en mi HomePod.
Es precisamente la imposibilidad de usar otros dispositivos de otras marcas lo que ha hecho que la smart home no haya tenido una mejor acogida, pero es fácil ver por qué: compañías como Apple quieren que compres todos sus productos, no los de su competencia.
Hay algo de esperanza con Matter, un nuevo estándar de smart home que promete la posibilidad de comprar productos de varias marcas para usarlos entre ellos, aunque esto no sirve de nada ahora mismo.
Además, seguro que no cambia el funcionamiento del jardín vallado y los Apple Watches no pasarán a funcionar con móviles Android.
Así, aunque me gustaría estar disfrutando de un móvil plegable, Apple no me deja.
Artículo original publicado en Tech Advisor.