Tal y como se anuncia en el primer párrafo de un comunicado que la compañía publicó este 17 de noviembre, Huawei ha “decidido vender todos los activos de negocio de Honor”. Así, se confirman las sospechas de una posible venta de la submarca de Huawei.
Como sabrás si estás familiarizado con el tema, la producción y el suministro de los dispositivos de Huawei ha sufrido considerablemente los últimos 18 meses, después de que la compañía china fuera incluida en la lista de entidades de Estados Unidos bajo el presidencia de Donald Trump.
Esto ha hecho que la compañía haya tenido que tomar una decisión para asegurar la supervivencia de Honor: vender esta parte de su negocio a Shenzhen Zhixin New Information Technology Co., Ltd.
Se trata de una empresa recién creada formada aproximadamente por 30 agentes y firmas de inversión, junto al gobierno local de la ciudad de Shenzhen. La compañía ha descrito esta decisión como una “inversión de mercado para salvar la cadena industrial de Honor”.
Aunque Honor, que fue lanzada en 2013, siempre ha querido presentarse a los consumidores como una marca separada de la compañía madre, solo será así verdaderamente a partir de ahora, puesto que “Huawei no tendrá ninguna acción ni estará involucrado en la gestión del negocio o la toma de decisiones de la nueva compañía Honor”.
Al separarse completamente de Huawei, Honor debería poder evitar las sanciones impuestas por el gobierno estadounidense. De lo contrario, Honor no podría hacer negocio con compañías de ese país ni comprar componentes que utilicen tecnología estadounidense.
Se desconoce qué significa esto para los futuros móviles de Honor y cuándo empezarán a verse los efectos de esta venta en cuanto a los dispositivos del futuro. Pero, a no ser que las restricciones a Huawei cesen, seguramente Honor dejará de usar los procesadores Kirin y otros componentes fabricados por Huawei.
Se pensaba que, con una nueva administración elegida en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de 2020 (especialmente si esta era demócrata), las restricciones impuestas por la orden ejecutiva de Trump terminarían.
No obstante, pese a que Joe Biden dijo en su día que lo tendría en cuenta, un asistente representando al ahora ya presidente-electo clarificó poco después que “revaluaría las tarifas cuando llegara a la presidencia”, tal y como informó Forbes.