El anuncio de Apple sobre la llegada de los primeros Mac con su propio chip ARM M1 podría ser el empujón que necesita Windows en ARM para llegar a la línea de meta. O por lo menos así lo esperamos.
En el evento de lanzamiento de Apple del martes, se presentó un MacBook Air, un MacBook Pro y un Mac mini que utilizan el primer procesador M1 de Apple, basado en la arquitectura ARM. Con ocho núcleos en su interior (cuatro núcleos de eficiencia y cuatro más de rendimiento), la cosa promete, tanto en lo que se refiere a una autonomía de la batería más duradera (18 horas para el nuevo MacBook Air de 13”) como mejor rendimiento.
Todo esto le debería sonar a aquellos que han visto Windows en ARM evolucionar en los últimos años, especialmente si empiezas a estudiarlo a fondo y a mirar los números. Lo que esperamos es, no obstante, que la combinación de la influencia de Apple, así como los esfuerzos existentes de Microsoft puedan hacer que Windows en ARM sea una realidad.
Promesas vagas de rendimiento
Las afirmaciones de Apple deben cuestionarse primero un poco.
La afirmación de la compañía de que el Air con M1 es “tres veces más rápido que cualquier notebook Windows comparable de su categoría” es tan vaga que termina por no significar demasiado. ¿Son benchmarks sintetizados? ¿Que Apple ha optimizado sus procesadores M1 nuevos? ¿Con qué se compara el M1: con un chip Intel Ice Lake de 10ª generación? ¿Comet Lake? Uno de los nuevos procesadores Tiger Lake de 11ª generación?
Ya lo vimos con Windows en ARM, específicamente con los esfuerzos de Qualcomm con su Snapdragon. Empezando con el Asus NovaGo, los portátiles con Snapdragon consiguieron cumplir una promesa (una autonomía de la batería que durara realmente todo el día), pero se quedaron cortos en rendimiento y no consiguieron estar a la altura de un Intel Core.
Con el tiempo, Windows en ARM pasó (o se lo metió) en un nicho para PCs siempre conectados, que podían ofrecer un rendimiento medio, pero una excelente conectividad al combinar wifi y modems.
Llámame escéptico si afirmo que el M1 de Apple no podrá superar a los portátiles Windows. Si fuera así, ya se hubieran presentado comparaciones frente a frente. También nos hemos dado cuenta de que Apple no ha abandonado los MacBook Pros con Intel Core, especialmente en el modelo de 16”.
El software importa
Donde Apple brilla es en la fusión de su hardware y su software. Craig Federighi, vicepresidente senior de Ingeniería de Software de Apple, aseguró que Safari funciona 1,5 veces más rápido, y que los Macs se encienden instantáneamente tras estar en reposo. “Al diseñar todo el sistema en conjunto, hardware y software, podemos mejorar lo que te gusta hacer en tu Mac”, dijo.
Es más importante, no obstante, la compatibilidad. Federighi anunció sus planes de unas apps “universales”, probablemente puro marketing para una App Store que podría reconocer que tu Mac utiliza Apple Silicon y descargar el software apropiado.
Ten en cuenta, demás, que el ecosistema de software de Apple es más pequeño y más focalizado, con una mayor énfasis en sus propias apps que el ecosistema de apps más grande y amplio de Windows.
Apple está pasando un poco de puntillas. Aplicaciones importantes como Adobe Photoshop no estarán disponibles como app “universal” hasta el año que viene, aseguró Federighi. Omitir apps como estas podrían relegar el MacBook Pro con M1 a un estado de “curiosidad” por ahora.
Esta es, no obstante, una área en la que la fuerza de Apple podría abrirle el camino a los PCs con ARM, fuera cual fuera el sistema operativo. Eso es porque, para los Macs con M1, entra en juego la tecnología de emulación Rosetta cuando el código nativo no está disponible.
En cuanto a Windows, los chips ARM pueden ejecutar apps de 32 bits y 64 bits al ser codificadas para ARM, y apps de 32 bits codificadas para X86 en Windows (pero todavía no pueden ejecutar las apps de 64 bits para X86 más comunes en otros PCs). Eso se supone que cambiará este mes, pero solo para aquellos que utilicen Windows Inside, y no para PCs que se venden actualmente.
Es hora de hacer de Windows en ARM una realidad
Hace años que empezó Windows en ARM, pero le está costando encontrar su lugar. Incluso el propio intento de Microsoft, el Surface Pro X con el chip Qualcomm SQ1 diseñado por Microsoft, fue lanzado sin compatibilidad con apps de 64 bits para X86. Apple llega tarde, pero se ha tomado su tiempo y ha presentado una visión más cohesionada a sus clientes.La influencia de Apple podría ayudar mucho. Los desarrolladores que se comprometan a codificar para Apple en ARM podrían justificar fácilmente el desarrollo de Windows en ARM también.
Los procesadores X86 no se irán a ninguna parte, pero el paso de Apple a ARM preocupa claramente a Intel: “Creemos que los PCs con Intel (como aquellos basados en procesadores para móvil Intel Core de 11ª) ofrecen a los clientes globales la mejor experiencia en áreas a las que damos importancia, así como la plataforma más abierta para desarrolladores, tanto hoy y en el futuro”, dijo Intel en un comunicado reciente.
¿Qué significa eso? ARM importa.
Ahora, es hora de que Microsoft lance su propia interpretación de 64 bits para procesadores ARM en su canal Windows Insider, y para los fabricantes de PC una vez más se fijan en las plataformas compatibles.
El argumento acerca de la conectividad de Windows en ARM no tiene demasiado sentido durante una pandemia como en un mundo en el que la gente puede viajar libremente y conectarse dónde sea. Pero la visión sigue siendo la misma, y Apple podría ayudar a llegar allí.
Artículo original publicado en PCWorld US.